La forma y el fondo: Webcongress Valencia (parte I)

Cualquier actividad que moviliza a un público genera una expectativa. El grado de satisfacción no depende únicamente de la variable “contenidos”, influyen los ponentes, los sponsores y sus espacios, los tiempos de intervención, el turno de palabra del público, los medios técnicos, los servicios añadidos, el entorno, la experiencia, el acceso a los recursos que componen la jornada, y la suma de todos ellos hacen que concluya con la sensación de cubrir expectativas, sobrepasarlas o no llegar a ellas.

Con esta valoración la jornada de hoy ha contado con buenas intervenciones y aspectos mejorables para futuras sesiones. Aunque desde la organización el objetivo es que todo fluya sin incertidumbre y puntualmente, en muchas ocasiones se peca de querer incorporar contenidos muy diversos en tiempos muy ajustados sin tener en cuenta que si una intervención es rica, el turno de preguntas todavía la hace más valiosa.

Para restar incertidumbre en el público y satisfacerlo por encima de sus expectativas es aconsejable informar al inicio sobre los recursos con los que contará antes y después del evento, el compromiso de alojar las intervenciones en un lugar accesible, información sobre streaming o video al que acudir con posterioridad e indicaciones respecto cómo seguir las conversaciones dentro y fuera de la sala a través de los medios sociales.

En todas las intervenciones sobre internet y redes sociales se incorpora ahora el “backchannel” las conversaciones de los oyentes,  una pantalla donde aparecen los comentarios de las personas asistentes de manera presencial o remota (como bien explica Gonzalo Álvarez en este enlace que he incluido).  En el Webcongress ha habido “canal” pero nadie ha tomado nota de lo que se consultaba o comentaba para trasladarlo a los ponentes que han intervenido y tan importante es que aparezcan los comentarios, como que alguien los gestione y haga de nexo entre el ponente y el público virtual.

Qué buscamos en las sesiones: refuerzo y provocación, compartir puntos de vista respecto a avances y tendencias en un campo en continua actualización y reflexiones de especialistas que nos inviten a innovar en nuestro modo de ver el mundo, a incorporar ideas, a pensar en ellas. Algunos aspiramos incluso a encontrar algún visionario que con sus mensajes provoque acción y todos acudimos con ánimo de vivir experiencias nuevas y alguna sonrisa.

Lo positivo del Webcongress, como el resto de eventos que organiza Ouali, es la sensación de globalidad que trasladan, con ponentes que operan en todo el mundo y cuentan sus experiencias.

Acudimos a escuchar personas interesadas en el presente y futuro de la red, en cómo hacer nuestra marca o reputación online, en cómo asesorar a nuestros clientes para que hagan un uso adecuado de los medios sociales, cómo generar o trasladar nuestro negocio a la red e incrementar las ventas, de cómo posicionar nuestra carta de presentación con la gestión de nuestros contenidos, etiquetas y enlaces (SEO) o mediante publicidad (SEM).

Al final nos quedamos con un par de mensajes por ponente, con los términos utilizados que nos resultan familiares después de oírlos sesión tras sesión, aunque no sepamos muy bien en qué consisten realmente, con algunas aplicaciones y recursos  y la sensación de seguir más enredados que ayer.

El fondo, los contenidos de la sesión,  en la próxima entrada.

3 comentarios (+¿añadir los tuyos?)

  1. Gonzalo Álvarez Marañón
    May 27, 2011 @ 09:22:30

    Como bien señalas, en todo evento la organización debería crear dos figuras fundamentales hoy en día:

    1) Un twitterreportero: Cada vez más gente sigue eventos a través de Twitter. Los asistentes que espontáneamente tuitean sobre la charla proporcionan una secuencia viva de información, pero descoordinada y muy personal. Si no quieres que nada que tú consideras importante sea pasado por alto, contrata a un twitterreportero. Puede ser un periodista profesional o alguien con juicio crítico sobre el tema y rapidez de reflejos, cuya misión consistirá en tuitear la información más relevante de las charlas y las noticias más destacadas del evento. Explica a la audiencia que existe un twitterreportero. En algunas eventos regalan pases a algunas personas a cambio de que tuiteen todo lo que ocurre.

    2) Un moderador del backchannel: Debería seguir el backchannel en su propio portátil o teléfono. De esta forma estará al tanto de la conversación que está teniendo lugar durante la charla. Esta información le proporciona una cierta ventaja si debe reaccionar ante algún comportamiento negativo o malestar de la audiencia. Podrá resolver problemas como que el audio está bajo o el aire acondicionado muy fuerte, o informar a los siguientes ponentes sobre cómo están cayendo las conferencias, por si hace falta algún giro en la marcha del evento.

    El backchannel no es algo que la organización decida si habrá o no habrá. Sólo puede decidir si lo proyectará en una gran pantalla a la vista de todos o no.

    La creación del backchannel no puede controlarse por la organización del evento ni por los ponentes. El backchannel es espontáneo, auto-organizado y descentralizado. Cualquier intento de dirigirlo o silenciarlo es contraproducente.

    Ya va siendo hora de aceptarlo. Desde que llegó Twitter, el backchannel da voz propia a las audiencias. Las audiencias están cambiando.

    Te guste o no, mientras tú hablas tu audiencia puede estar usando las redes sociales desde su móvil o portátil. Te guste o no, el backchannel siempre termina creándose. Te guste o no, nadie puede controlarlo.

    Lo que sí puedes hacer es influirlo, alimentarlo, encauzarlo. Siempre desde la humildad y desde el objetivo de valorar a la audiencia y desear aportarle valor.

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  2. Trackback: Presentar en público ¿Arte o técnica? « apartirde2cero

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